miércoles, 23 de septiembre de 2009

Antiguo cuento de Neorkraton

Oriy y Aciv eran dos amigos inseparables. A Oriy le gustaba jugar con su imaginación y a Aciv le gustaba buscar cosas. Solía decir que buscaba cosas para así, indirectamente, encontrar lo más importante de la vida; todavía no sabía qué era esa cosa, pero la buscaba y la quería encontrar. Un día Oriy quería que Aciv dejara de buscar un poco y jugara con él, pero Aciv quería que Oriy madurara un poco y dejara de fantasear, y se pelearon y se separaron y cada uno fue a hacer lo suyo. En el fondo de sus corazones sabían que a la noche se iban a encontrar y se iban a reconciliar. Pero esa tarde, mientras Oriy jugaba en la playa, una ola salvaje lo arrastró al mar, y allí una raura mágica lo devoró: el cuerpo de Oriy dejó de existir, pero su alma, por la magia de la raura, se quedó en la playa donde había estado jugando. Esa noche Aciv volvió a su casa cargado de pequeñas cosas que había encontrado, y se quedó esperando a Oriy. El alma de Oriy lo miraba entristecido por la ventana, sin que el otro pudiera verlo. ¿Qué iba a hacer ahora? ¿Cómo podía decirle a Aciv que había muerto?
Cuando a los pocos días Aciv vio que Oriy no volvía, decidió salir a buscarlo. Creía que estaba realmente enfadado con él y que por eso nunca había vuelto, y estaba arrepentido y quería pedirle perdón, y que si era necesario renunciaría a sus búsquedas con tal de volver a estar junto a él. Oriy se compadeció, porque Aciv empezó a preguntarles a diferentes personas si habían visto a Oriy, pero todos negaban. Entonces el alma de Oriy tomó forma de un cangrejo, y cuando Aciv le preguntó si había visto a su amigo, el falso cangrejo le dijo sí, a cinco días de navegar hacia el poniente. Y una vez que Aciv llegó al lugar indicado, el alma de Oriy tomó forma de un anciano, y le dijo a Aciv que lo había visto cerca de una isla con una gran montaña; una vez allá, Oriy tomó forma de mono aullador, y le dijo a Aciv que Oriy había partido hacía una semana en dirección al naciente. Y allí fue Aciv, esperanzado, creyendo que encontraría pronto a Oriy. Pero Oriy viajaba con él sin que pudiera saberlo, siempre camuflándose de animal, niño o planta, dándole pistas falsas, dándole esperanzas interminables.


Una de las historias que Seron contaba a Actas de pequeño y que Actas contará a Saidara de bebé. (Inspirada en el cuento que el papá le dio a Yakumo, en School Rumble.)

No hay comentarios:

Publicar un comentario

A ver qué tenés para decir...