martes, 16 de marzo de 2010

No egoísta, sea contento

-¿No le parece, joven, que se le da demasiada importancia a la propia felicidad y la propia realización en estos días?
Como de costumbre, me encontré en dificultades para encontrar una respuesta a las preguntas del linyera.
-Claro, si uno reflexiona un poco -continuó-, concluirá que los hombres realmente felices son aquellos cuya alegría y realización personal consiste en contribuir a la felicidad y realización ajena, ¿cierto? ¡Pero claro, esa gente maravillosa la tiene muy fácil! ¿Qué pasa de nosotros, los incapacitados para ese tipo de solidaridad? Simplemente somos egoístas, y cuesta más que sonreír cuando vemos a alguien alegre. ¿No le pasa lo mismo a usted, joven?
Murmuré que sí y me encogí de hombros. La verdad que no tenía muchas ganas de moverme estando allí entre sus trapos y cartones. Hacía frío.
-Igual, lo que más me molesta -siguió, sin interesarse en mi respuesta-, es esa gente que se cree feliz y que con eso está todo: ¡no, tonto, esa autoconvicción resultará inútil al fin y al cabo! Decime, ¿a vos nunca te estropearon completamente tu determinación, que parecía hermosa hasta el momento...? A mí si me lo hicieron tantas veces... Pero mirá, encontré una explicación para todo, y aunque no me está dando grandes resultados me parece indestructible: antes que creerte feliz interiormente a pesar de estar de variado humor y sentimientos, es preferible intentar estar siempre contento, ¡ser contento!, a pesar de lo feliz o infeliz que seas en el momento; porque una vez que te rompieron la felicidad autoconstruida, nene, no hay nada que la reponga a menos que seas muy imbécil. En cambio estar hipócritamente contento es un salvavidas de largo alcance... y al fin y al cabo, vos que eras egoísta y la felicidad ajena te rompía las pelotas, te das cuenta un día que estás llorando, conmovido, por el otro...
Se quedó en silencio, frotándose la manos y largando vapor por la boca.
-Gracias por todo lo que hiciste por mí -le dije, emocionado de verlo-. Cuando necesites llorar voy a estar a tu lado para retribuírtelo.

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