No sé por qué es, pero lo siento desde chiquito. Un hormigueo, un temblor, una vibración de la carne y la piel. En alguna parte del cuerpo, una cualquiera. Primero pensaba que estaba relacionado con acontecimientos futuros: una especie de premonción. O acontecimientos pasados, una percepción especial, intuición, algo que me avisaba sobre cosas raras que habían pasado. Pero esas ideas las deseché una a una. Ahora sólo sé que hormigueo y punto. Porque sí, cuando quiere.
Haruka hanata. Muero de ganas de irme de vacaciones de repente. No fugarme, sino escapar a ver otra vida y compararla con la anterior, crecer y volver cuando me sienta listo. Osea cuando tenga ganas.
jueves, 8 de octubre de 2009
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¿Es lindo el hormigueo?
ResponderEliminarYo también tengo esas ganas de vacacionar.