Vos estabas ahí y yo no.
Vos seguías ahí cuando yo llegué.
Permaneciste todavía mientras yo miraba alrededor.
No te quejaste cuando tropecé con vos.
Te pedí disculpas, me disculpaste.
Te invité a salir, y aceptaste.
Tomamos un helado y te dio frío.
Te mostré un bote, no subiste.
Te dije chau, lo mismo dijiste.
Y mientras me iba vi
que estabas en el mismo lugar donde te conocí.
martes, 17 de septiembre de 2013
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