miércoles, 5 de diciembre de 2012

Disfrutador

Nunca fui un realista, como me autodenominaba. (Era un pesimista moderado.) Hoy tampoco puedo codearme con los optimistas, ni con esos optimistas realistas, ni con los optimistas entusiastas. Diría que soy un simple disfrutador de la vida. Disfrutador de las pequeñas cosas, de las buenas historias y de los golpes bajos, disfrutador de las situaciones incómodas, de los fracasos, de la gente traidora, de los planes deshechos, de las discusiones con el mundo. No disfruto porque cueste o porque sea fácil disfrutar los tragos que nos tocan tomar, sino porque veo que puedo disfrutar las cosas que a la gente generalmente entristecen, bajonean, enojan, exasperan, matan, y a mí me produce placer. Disfruto disfrutar. Hola o chau, no o tal vez, besame o no me toques, andate o morite: digas lo que digas, yo disfruto que digas algo.

*Disfruto lo que soy
y cómo voy cambiando.
Disfruto aunque digas no,
mientras digas algo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

A ver qué tenés para decir...